La vida según #Friends

Sé que todos hemos escuchado, y en el mejor de los casos, visto la serie de “Friends”, ¿o no?

Para quienes me conocen, saben que es una de mis series favoritas, sin embargo, pocos, o casi nadie sabía, que aunque la he visto varias veces, nunca había llegado al capítulo final… hasta ahora.

La razón por la que jamás había tenido el “valor” de concluir esta serie no es tan rebuscada, en realidad se trata de un miedo al final, porque creo que lo menos añoramos en nuestro día a día, es un final. Sí, está un tanto relacionado a la tanatofóbia que a veces me hostiga, pero ahora, encerrado, no queda mas que cerrar ciclos, reconocernos y reconstruirnos de principio a fin.

Nadie dijo que sería sencillo, por eso, la vida según “Friends” es el estandarte de muchas personas que, como yo, nos identificamos con los diferentes ciclos de la vida, que en su mayoría, son etapas llenas de miedo, incertidumbre, amor, desilusión, golpes de suerte y hasta historias entrelazadas que jamás hubiéramos imaginado. Estas líneas son escritas días antes de llegar al siguiente nivel, sí, de llegar a mis 30 años, y es complicado. La serie se desarrolla, en teoría, entorno a la vida de un grupo de amigos veinteañeros que están descubriendo quiénes son, qué es lo que quieren, y lo que en verdad los hace felices, y es difícil darte cuenta que a veces, esto significa tomar rumbos distintos a los de las personas que más queremos.

De cierta forma, sí existe un miedo al cambio, pero para mi, es un temor que refleja la angustia de perder a nuestros seres queridos, nuestra familia, nuestros amigos, nuestra rutina, nuestras charlas, esos corazones que se entrelazan en nuestro camino y que nos llenan el alma, que nos reconfortan en los días más difíciles de nuestras vidas, y claro que me ha pasado decenas de veces, y admito que aún me cuesta trabajo entenderlo y aceptarlo.

Posiblemente, para muchas personas, el compartir lo difícil que ha sido cerrar este ciclo suene una exageración, pero las 10 temporadas me llevaron a entender lo complejos y divertidos que podemos ser ante diversas situaciones. Siempre es aterrador pensar en el final, en cualquier final… Pero siempre tomarlo de la mejor manera será nuestra mejor opción.

En teoría, a los 20 deberíamos ser personas independientes, valientes, divertidas, exitosas, seguras, soñadoras, elocuentes, libres y con muchas otras características que siempre se nos han inculcado, pero ¿por qué no ser diferente? ¿Por qué no romper estereotipos? ¿Por qué no soñar diferente?

“Friends” me ha dejado lleno el corazón, añorando siempre permitirme ir por un buen café con mis amigos, vivir las diferentes etapas de la vida juntos, sin importar la distancia, la ideología o los sueños que cada uno tenga, aceptando desapegarte de monotonías, rutinas y estilos de vida que a veces limita nuestras experiencias.

A veces se trata de tener el valor de admitir que estás listo para el siguiente escalón, que todo llega, todo pasa, todo cambia, todo acaba y todo vuelve a comenzar, quizá de una forma muy diferente a la que conocemos, pero es el ciclo de la vida y somos parte de él.

¡Estoy listo!